Lograr la tensión adecuada en el arco de su violín es clave para lograr el mejor sonido.
La tensión o holgura de la cerda del arco afecta significativamente tanto la calidad del sonido como la facilidad para tocar el violín.
Dominar cómo ajustar la tensión garantiza que su arco permanezca en condiciones óptimas para cada actuación y sesión de práctica.
Controlar la tensión del arco del violín
La piedra angular del mantenimiento adecuado del arco radica en comprender cómo ajustar su tensión antes y después de cada uso.
Ajustar la tensión es sencillo: lo gobierna un tornillo situado al final del arco, llamado “rana”. Al girar el tornillo en el sentido de las agujas del reloj se tensa el cabello, mientras que en el sentido contrario se afloja.
Determinar la tensión ideal requiere precisión y buen ojo para la sutileza.
Cómo apretar el arco del violín
Los jugadores novatos suelen pecar de tensión excesiva, lo que supone riesgos para la integridad del arco.
Apretar demasiado puede provocar varios problemas:
- Dificultad para controlar el arco y producir un tono deseable.
- Riesgo de dañar la punta del arco o los componentes internos.
- Estiramiento permanente del pelo del moño.
Evite apretar el arco hasta el punto en que el palo quede perfectamente recto o adopte una forma convexa.
Entonces, ¿cuánta tensión es suficiente?
Una pauta útil es asegurarse de que un lápiz encaje perfectamente entre el pelo del moño y el palo en el centro.
Gire gradualmente el tornillo de ajuste en el sentido de las agujas del reloj hasta que el lápiz encaje con precisión, proporcionando un control óptimo durante la inclinación.
Cómo aflojar el arco del violín
Después de cada uso, es fundamental liberar la tensión para preservar la longevidad del arco.
Simplemente gire el tornillo en sentido antihorario 2 o 3 veces para relajar el pelo del lazo cuando no esté en uso. Asegúrese de que el cabello parezca flojo en el lazo, pero evite aflojarlo excesivamente para evitar que el tornillo se desenrosque y la rana se desprenda.
Al aflojar la tensión, permite que el arco vuelva a su estado de reposo, aliviando la tensión en el cabello.
La regla de oro
Recuerde, es primordial ajustar la tensión del arco del violín antes y después de tocar. Si bien el truco del lápiz puede requerir práctica, en última instancia se convierte en una segunda naturaleza.
A medida que avances, calibrarás intuitivamente la tensión, observando la proximidad del cabello al palo en diferentes puntos a lo largo del lazo.
Seguir esta regla fundamental garantiza un rendimiento óptimo y una longevidad de su arco de violín. Apriete para jugar, afloje para guardar.